El Día Internacional del Agua (22 de marzo) nos anima a realizar una seria y profunda reflexión sobre la importancia de este recurso en el mundo y como su ausencia, o su excedencia, afecta principalmente a los colectivos de personas más vulnerables.
El acceso al agua limpia y al saneamiento está recogido en el ODS 6 (Objetivos de Desarrollo Sostenible) como uno de los ejes centrales del bienestar de las personas y del derecho a su acceso de forma gratuita o a precios asequibles.
Las estimaciones de la ONU advierten que en el año 2050, al menos un 25% de la población mundial vivirá en un país afectado por la escasez crónica y reiterada de agua dulce (África Subsahariana, Asia Central, Asia Meridional, Asia Oriental y Asia Sudoriental).
A fecha de hoy, los datos siguen siendo devastadores:
Al menos 892 millones de personas continúan con la práctica insalubre de la defecación al aire libre. Las mujeres y las niñas son las encargadas de recolectar agua en el 80% de los hogares sin acceso a agua corriente
La escasez de agua afecta a más del 40% de la población mundial y se prevé que este porcentaje aumente. Más de 1.700 millones de personas viven actualmente en cuencas fluviales en las que el consumo de agua supera la recarga.
Más del 80% de las aguas residuales resultantes de actividades humanas se vierten en los ríos o el mar sin ningún tratamiento, lo que provoca su contaminación.
Cada día, alrededor de 1.000 niños mueren debido a enfermedades diarreicas asociadas a la falta de higiene.
Aproximadamente el 70% de todas las aguas extraídas de los ríos, lagos y acuíferos se utilizan para el riego.
Las inundaciones y otros desastres relacionados con el agua representan el 70% de todas las muertes relacionadas con desastres naturales
Para reducir estas alarmantes cifras se recomiendan lograr, antes de 2030, los siguientes objetivos que, a día de hoy, están muy lejos de poder conseguirse:
- De aquí a 2030, lograr el acceso universal y equitativo al agua potable a un precio asequible para todos
- Lograr el acceso a servicios de saneamiento e higiene adecuados y equitativos para todos y poner fin a la defecación al aire libre, prestando especial atención a las necesidades de las mujeres y las niñas y las personas en situaciones de vulnerabilidad
- Mejorar la calidad del agua reduciendo la contaminación, eliminando el vertido y minimizando la emisión de productos químicos y materiales peligrosos, reduciendo a la mitad el porcentaje de aguas residuales sin tratar y aumentando considerablemente el reciclado y la reutilización sin riesgos a nivel mundial.
- De aquí a 2030, aumentar considerablemente el uso eficiente de los recursos hídricos en todos los sectores y asegurar la sostenibilidad de la extracción y el abastecimiento de agua dulce para hacer frente a la escasez de agua y reducir considerablemente el número de personas que sufren falta de agua
- Implementar la gestión integrada de los recursos hídricos a todos los niveles, incluso mediante la cooperación transfronteriza, según proceda
- Proteger y restablecer los ecosistemas relacionados con el agua, incluidos los bosques, las montañas, los humedales, los ríos, los acuíferos y los lagos
- Ampliar la cooperación internacional y el apoyo prestado a los países en desarrollo para la creación de capacidad en actividades y programas relativos al agua y el saneamiento, como los de captación de agua, desalinización, uso eficiente de los recursos hídricos, tratamiento de aguas residuales, reciclado y tecnologías de reutilización
Para ello, en 2018 se trazó un plan específico a 10 años (2018-2028) que serán claves para el futuro del agua en el planeta. Es el llamado “Decenio internacional para el agua” que pretende impulsar y acelerar iniciativas que afronten los desafíos de nuestra sociedad en este tema.
https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/2018/07/decenio-internacional-agua-para-el-desarrollo-sostenible-2018-2028/
Aquí ofrecemos otros enlaces relacionados con el tema:
Noticia El País último informe mundial de Naciones Unidas sobre Medioambiente, marzo 2019
Acceso al informe de Naciones Unidas, marzo 13 de marzo de 2019
José Luis Barreiro Areses es coordinador de Entreculturas en Galicia y Asturias y periodista
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