El corazón de todas las organizaciones sociales son (o deberían ser) las personas.
La labor del Servicio Jesuita a Refugiados se puede resumir brevemente como individuos que emplean sus vidas y energías para proteger -en el sentido más amplio de la palabra, que implica acoger, custodiar y luchar por- a otros individuos.
Algunas de las personas que conforman la organización, con su trabajo siguen bombeando el ideal de justicia y fraternidad que movió al padre Arrupe hace 40 años, otras experimentan la acogida y el acompañamiento que brinda la organización. Todas ellas, independientemente de su relación con la ONG, pueden decir que sus vidas han sido transformadas por el encuentro con el JRS.
Para cerrar este mes de celebración, traemos los testimonios de algunas de ellas.
–> Aquí puedes leer el testimonio completo de Pau
Haz click aquí para leer la entrevista a Cova <–
–> Puedes ver aquí el testimonio de Marta
Aquí puedes escuchar la experiencia de Fran <–
–> Puedes leer más sobre el proyecto, sostenido por Entreculturas, pinchando aquí
Pinchando aquí podrás conocer con más profundidad este proyecto impulsado por SJR México con y para mujeres migrantes, así como sus testimonios <–
Gracias a todas las personas que nos han compartido tan generosamente su testimonio y también a las que nos han ayudado a contactar con ellas.